En un principio pensé dedicar el blog a mis adhesivos ultras pero lo que me ocurrió ayer sábado es tan surrealista que merece la pena que os lo cuente. Pués baje a Madrid con mi mujer en un viaje relámpago, tal es así que saliamos de Zaragoza a las 7 de la mañana y a las 18:00h ya estábamos de vuelta, que ocurrió, pués que como había que comer le dije a mi mujer de parar en un restaurante de carretera y allí que entramos a comernos unos huevos fritos con jamón, vuelta y vuelta en la sartén, acompañados de unas patatas panadera. ¿Y quién estaba comiendo en la mesa de al lado? pues si, era él, el Maestro José Tomás que andaba de camino a la corrida de ésta tarde a la Monumental de Barcelona, y yo que soy amante de la fiesta y que todos los años tengo la costumbre de ir a ver una corrida para la feria del Pilar en compañía de mi padre le deseé un clásico Suerte Maestro, le pregunté que para cúando lo veíamos por Zaragoza, a lo cual sonrió, y le agradecí el detalle de hacerse una foto.
A excepción de los adhesivos no soy coleccionista de cosas, pero que quereís que os diga, me hizo mucha ilusión el hacerne una foto con el MAESTRO.
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